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Educar es Educarse, a propósito del filósofo Hans-Georg Gadamer

Fecha: 26 febrero, 2014

Educar es Educarse, a propósito del filósofo Hans-Georg Gadamer

Dr. Pablo Camus G.

Académico Escuela de Educación

Universidad Católica del Norte

Educar es Educarse, a propósito del filósofo Hans-Georg Gadamer y la conferencia que pronunció en 1999 en el Dietrich-Gymmnasium de Eppelheim, en el marco del ciclo “La educación en crisis” y su apuesta a la educación y, sobre todo, a la importancia de la actividad cultural que se genera en el propio seno de la familia, el lugar donde las posibilidades de desarrollo son determinantes en la vida del niño. Hoy en día se hace necesario adaptar y mejorar las condiciones de base de la educación, otorgándole principal atención a la formación primaria (parvulario) y secundaria (básica).

Al mismo tiempo, debemos pensar en cuál es el sentido de la educación y pensar que ésta es parte de la relación con el otro, lo que encierra que la educación es un proceso de educar pero también de educarse. Si el maestro no es capaz de educarse con su alumno, difícil va a ser la tarea de conocer y conocernos a partir de nuevos y viejos símbolos culturales que están presentes en nuestra sociedad.

No hace mucho, con un grupo de alumnos de Pedagogía en Educación Básica de la Universidad Católica del Norte (a propósito de la relación con el otro: el alumno y el profesor) analizábamos las representaciones que hacen los niños de la realidad, a partir de sus contextos, sus actuaciones y la manera como ellos desarrollan sus aprendizajes frente a sus propios sueños, los que son expresados a partir de la observación y características de su propio entorno (familia-hogar, curso-escuela, entre los más importantes).

Cobra relevancia en este punto de la observación, un principio recurrente pero ausente a la hora de pensar en el ámbito de la educación, destacado por el grupo de alumnos… nuevamente el sentido del otro, dado que enseñar al ser humano a vivir en comunidad y desarrollar aprendizajes forma parte de los elementos esenciales de toda educación.

La posibilidad de los niños de cumplir sus sueños radica en que sus representaciones de la infancia tengan una plataforma de desarrollo donde puedan plantear sus desafíos y emprender nuevos conocimientos. Las mejores oportunidades que se brindan en la infancia, son aquellas que proponen mejores posibilidades de acceso a la cultura y a los espacios públicos destinados a profundizar el valor de educar y el valor de educarse.

El Estado en este punto es clave, dado que debe garantizar un contexto en que los niños puedan desarrollar sus potencialidades y puedan ser promovidos social y culturalmente. Así, las palabras libro, biblioteca, escuela, saberes, cine y teatro se constituyen en símbolos, espacios y formas culturales del aprendizaje. En este sentido, cobran protagonismos los espacios cívicos para conversar las ideas y construir visiones de país, alcanzar el sueño de la educación que, sin duda, y como planteara Wulf, estructuran de forma nueva las experiencias cotidianas de la conciencia, satisfacen los deseos y aumentan el colorido y la veracidad de la vida.

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