Visitantes conocieron experiencias de cooperación con comunidades de pescadores de la región de Coquimbo.
Su admiración por la capacidad de los pescadores artesanales de la región para asociarse y asumir un rol protagónico en el ámbito de la acuicultura manifestaron los integrantes de la delegación colombiana que visitaron recientemente la Universidad Católica del Norte.
Los directivos del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) de Colombia permanecieron durante una semana conociendo en terreno las estrategias de asistencia técnica impulsadas a nivel internacional por la UCN, específicamente a través de su Departamento de Acuicultura. El programa incluyó reuniones con expertos de la Facultad de Ciencias del Mar, el Centro de Innovación Metodológica y Tecnológica, Aquanorte y proyectos relacionados. Adicionalmente, los visitantes, ocho subdirectores de los diferentes centros dependientes del SENA, tuvieron la oportunidad de conocer en terreno las experiencias de capacitación y transferencia a comunidades costeras y de aguas interiores efectuadas por los docentes locales, y que constituye uno de las principales labores en Colombia.
Miguel Angel Pardo, asesor de la red acuícola y de pesca de la dirección de formación profesional del SENA, relató que la maricultura (acuicultura en zonas marinas) en su país aún no se ha desarrollado en forma adecuada, y presenta fuertes deficiencias desde el punto de vista ingenieril y del manejo de las diferentes especies. “Requerimos fortalecer las capacidades de infraestructura de los centros de formación y a las personas que van a hacer las transferencias tecnológicas”. En este último aspecto esperan que la cooperación con la UCN represente un avance, para lo cual instructores colombianos se capacitarán en Coquimbo, en las áreas de cultivos acuícolas, diseño y montaje de sistemas de recirculación.
Credibilidad
Uno de los aspectos más destacados por los representantes del SENA fue la gestión realizada por la UCN, a través de Acuicultura, con las comunidades de pescadores artesanales, logrando credibilidad y generando cambios tendientes a la conversión desde la pesca extractiva al cultivo.
Para Alfonso Silva, director del Departamento de Acuicultura, ha sido clave en este sentido la preocupación, insistencia y seguridad que tiene la unidad respecto a que la acuicultura es “una buena herramienta para impulsar la reconversión y desarrollo de las comunidades pesqueras y comunidades organizadas, lo que ha sido probado en diversos proyectos dentro y fuera del país”. Y paralelamente, subraya, “el compromiso del cuerpo académico y profesional que labora en unidades creadas especialmente para el trabajo con estos actores, como Aquanorte”, precisa Silva, agregando con satisfacción que esta modalidad de acción fue reconocido por los integrantes de la misión como un modelo a seguir para “llevar adelante y comprometerse con el éxito de proyectos que tienen especiales dificultades por la idiosincrasia de los actores involucrados”.
Esto último alude a la falta de asociatividad que suele caracterizar la pesca artesanal y que dificulta el desarrollo de proyectos a largo plazo. Las experiencias de las comunidades locales, realizadas en colaboración con la UCN, demostraron sin embargo a los visitantes de Colombia que sí es posible la integración. Así lo manifestó Miguel Angel Pardo, expresando su admiración por cómo los pescadores artesanales han logrado asociarse, formar gremios, “para generar sus propios sistemas de producción, y ellos mismos colaboraron en la construcción de conocimiento. Eso es lo que estamos valorando mucho, cómo el pescador entiende y asume la necesidad de volverse acuicultor. No es que llegan con una fórmula mágica, ellos participan desde la misma concepción de la idea. Eso podría significar una colaboración entre pescadores artesanales”.
Transferencia de conocimientos
Alfonso Silva reconoce este desafío que enfrenta Colombia, con una idiosincrasia similar a la chilena “en cuanto a una tradición esencialmente extractora y de corto plazo y con fuerte apoyo histórico de tipo estatal, lo cual debiera ir cambiando paulatinamente a una actividad mixta (extractora-productora), de mediano plazo y con un fuerte componente de emprendimiento”. Sin embargo, argumentó el directivo, estos grupos tienen también fortalezas que pueden aprovecharse, como el fuerte sentido de pertenencia a sus lugares de origen, donde se encuentran los recursos, y su sentido de trabajo colectivo.
El SENA, añadió, “cree que el Departamento de Acuicultura puede contribuir a impulsar la introducción de la acuicultura por su experiencia de trabajo en el área, reconocida a nivel latinoamericano y por sus exitosos proyectos de transferencia a comunidades en acuicultura, lo cual es una poderosa herramienta a la hora de demostrar a las comunidades objetivos que “se puede”, advirtió.
Ahora, y como parte de esta colaboración entre el SENA y la UCN, un grupo de expertos del Departamento de Acuicultura viajará a Colombia, para transferir conocimientos en diseño y gestión de unidades acuícolas y realizar una visita de diagnóstico a los centros de formación del área acuícola, ubicados en Tumaco, Guajira, Córdoba y Santa Marta.
Una vez cumplida esta etapa, se proyecta implementar programas y asistencias técnicas en el SENA, con un soporte técnico permanente por parte de la UCN.
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