Muestra sobre el científico polaco permanece abierta en el Museo Desierto de Atacama.
Orgulloso del legado dejado por Ignacio Domeyko en el país, está su bisnieto quien llegó especialmente invitado a la ciudad de Antofagasta para participar en la inauguración de una completa exposición sobre el legado del científico polaco.
Ignacio Domeyko Pérez, como descendiente del naturalista europeo, resaltó el aporte de esta figura del siglo XIX como uno de los pilares del desarrollo del país, resaltando su vida llena de aventuras que lo hizo emigrar desde su tierra natal, hasta llegar a Chile, patria adoptiva en la cual vivió por más de cuatro décadas.
Sobre las tres cualidades que caracterizaron la personalidad de su famoso bisabuelo, resaltó en primer lugar su fe católica. “Fue el motor de su vida. Siempre enfocó la relación de la creación del universo y del hombre con Dios.”
Explicó que un segundo motivo de la vida de Ignacio Domeyko fue “la responsabilidad con que enfrentó todas las labores que se le presentaron”; mientras que en tercer término enfatizó en la “generosidad que tuvo para entregar todos sus conocimientos como profesor a las nuevas generaciones de personas que ayudaron a construir nuestro país”, acotó.
Muestra
La presencia de parte de la familia del connotado científico y explorador en la ciudad, se da en el marco de la apertura de la muestra: “Ignacio Domeyko: Forjador de la Minería en Chile”, que permanece abierta en dependencias del Museo Desierto de Atacama, ubicado en el sector sur de Antofagasta.
Esta exhibición reúne en cinco vitrinas, diversos objetos personales, textos religiosos, trabajos y obras que son un testimonio del esfuerzo y compromiso entregado por Domeyko para aportar al desarrollo nacional.
La materialización de esta iniciativa, cuenta con la organización de la Fundación Ruinas de Huanchaca y el auspicio y patrocinio de Minera Escondida.
Una vida de Logros
Durante la inauguración de la exhibición intervino el Pedro Damjanic Yutronic, Vicepresidente de Producción de Minera Escondida Ltda y el Dr. Guillermo Chong Díaz, Director Ejecutivo de la Fundación Ruinas de Huanchaca. Este último, mediante imágenes, explicó diversos aspectos de la importancia del científico polaco, valorando su obra y legado.
Ignacio Domeyko nació en Polonia en 1802. Estudio en la Universidad de Vilna, licenciándose en 1820. Luego de un breve paso por Alemania, Domeyko se radica en París. Estudió en La Sorbona, el Colegio de Francia, el Jardín Botánico y la Escuela de Minas.
Llegó a Coquimbo (Chile), por un período inicial de seis años, siendo contratado por el industrial minero Carlos Lambert. Desde 1838 a 1846, fue profesor de Química y Mineralogía en esa ciudad Fundó talleres, escribió programas de cursos, organizó exploraciones geológicas, fundió hornos, construyó laboratorios, iniciando con todo ello un vasto programa de instrucción y experimentación de base científica y tecnológica.
Como intelectual, Domeyko contribuyó al desarrollo de la mineralogía, la geografía y la etnografía. Realizó múltiples actividades científicas y aportó decisivamente a la reforma del sistema educacional chileno.
En 1867 es elegido Rector de la Universidad de Chile y lo fue por 3 períodos, hasta 1883. A lo largo de su vida propuso novedosas ideas sobre educación, modernizó la enseñanza media y universitaria, aportó al Liceo de Coquimbo y a las cátedras y talleres de mineralogía del Instituto Nacional.
En 1882 resultó reelegido por el claustro pleno; tenía ya 80 años y más de 40 consagrados a la enseñanza. Prosiguió como rector hasta que, el 30 de mayo de 1883, se aceptó su renuncia. Falleció en 1889.
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