Autoridades y vecinos aplaudieron la Vocación Social demostrada por los jóvenes universitarios.
Con el objetivo ayudar y entregar un servicio a la comuna de Taltal, 12 jóvenes voluntarios de la Pastoral de nuestra Universidad remodelaron la plaza El Salitre de esa localidad, la cual se vio afectada por el aluvión ocurrido hace unos meses.
En la actividad participó el Alcalde de la comuna, Sergio Orellana, quien agradeció a los jóvenes por su interés de hacerse presente para apoyar a los pobladores de Taltal, incluso a pocas horas de transcurrido el aluvión hace unos meses. “Gracias por el esfuerzo, entusiasmo y dedicación que le colocaron a estas obras. Nuestra comuna siempre los esperará con los brazos abiertos, por las distintas acciones que podamos desarrollar en conjunto como municipio, parroquia y Pastoral Universitaria UCN, por el bien de nuestros vecinos”, expresó el edil.
En tanto, la Directora General de la Dirección General de Pastoral y Cultura Cristiana de la UCN, Erika Tello Bianchi, explicó que “esta fue una instancia de trabajo comunitario que los jóvenes planificaron hace unos meses, y que principalmente por problemas climáticos no lograron concretar antes. Pero finalmente efectuaron los trabajos junto a la comunidad, reconstruyendo esta plazoleta. Fue una instancia de crecimiento personal, donde colocaron a disposición de otros su tiempo y talentos; esto les permite vivir desde otra dimensión su vocación social”.
También estuvo presente la Presidenta de la junta de vecinos El Salitre de Taltal, Doris Gahona, quien felicitó a los jóvenes por esta iniciativa y les agradeció por donar su tiempo de descanso y estudio para ayudar a su población. “Jóvenes: sus obras de mejoramiento en nuestra plaza nos permitirán tener un entorno más lindo y un lugar de esparcimiento digno para nuestros vecinos, especialmente para los niños y adultos mayores del sector”, manifestó.
En la ocasión, Sebastián Robertson, Coordinador General de los jóvenes pastoralistas, agradeció a los vecinos, por el interés demostrado desde un comienzo, por trabajar en conjunto con los alumnos voluntarios de la UCN. “Para nosotros esta instancia es de gran crecimiento personal y comunitario, donde colocamos nuestros talentos a disposición de ustedes. Pese que estudiamos diversas carreras, nos esforzamos para ejecutar las labores necesarias para pintar los juegos, colocar bancas y arreglar los jardines”.
APORTES
Es importante destacar que las 8 bancas que se instalaron en la plaza El Salitre fueron fabricadas por 2 reclusos de la cárcel de dicha comuna. Y que además los materiales para instalar dichos asientos fueron donados por el Laboratorio de Investigación y Ensaye de Materiales de la Universidad Católica del Norte (Liemun).
Finalmente, este trabajo de remodelación de la plaza culminó con una ceremonia de bendición, presidida por el presbítero David Barril, encargado de la parroquia San Francisco Javier, y la entrega de una placa que indica las obras efectuadas en dicho espacio público.
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