Actividad realizada en la Casa Central contó con la participación de líderes de opinión nacional.
La necesidad de abordar el tema con mayor profundidad desde el ámbito del periodismo fue la tónica de las exposiciones realizadas en el marco del Tercer Seminario de Comunicación y Pobreza, efectuado en Antofagasta por nuestra Universidad.
El encuentro fue organizado por la Escuela de Periodismo, en conjunto con la Fundación para la Superación de la Pobreza, Hogar de Cristo, Un Techo para Chile, Fundación Trascender, Colegio San Luis y el Servicio Jesuita a Migrantes; y contó con destacados expositores, como los periodistas Fernando Paulsen y Beatriz Sánchez, además del Padre Felipe Berríos. Estos, abordaron la crisis político-institucional de nuestro país, también llamada crisis de confianza en las instituciones y en los distintos actores.
Durante la jornada, Paulsen expresó que la comunicación pública ha estado dominada por las disciplinas que plantean los economistas. “En general, a los economistas les carga hablar de la pobreza, más bien cuantifican al revés, miden los crecimientos del producto interno bruto, del IMACEC y de las exportaciones, entre otros, porque les encanta hablar en general; y a todos nos gusta hablar de lo que se incrementa en términos económicos y no de lo que disminuye o que permanece estancado”.
Asimismo, comentó sobre lo acostumbrada que está la sociedad a ser medida a través de estadísticas que engañan a la comunidad con cifras que no tienen los mismos significados en la práctica.
“Creo que los esfuerzos que hace la Fundación para la Superación de la Pobreza y otras entidades para tratar que se visibilice la realidad es valiosa y necesaria”, indicó el periodista.
También se refirió a la realidad de Antofagasta: “Es la ciudad de Chile que tiene el ingreso per cápita más alto, en función del ingreso de las mineras, pero nadie hace el cálculo para ver las variables, como los precios y el costo de cuánto es lo que realmente cuesta la vida en la región. Si tuvieran que cruzarlo por los ingresos que cada uno tiene, creo que están en una situación relativa de pobreza equivalente al resto del país”.
En tanto, el Padre Felipe Berrios destacó la realización del seminario, especialmente por el contexto nacional que se está viviendo. “Se está observando una situación de mucho cambio, de desconfianza, agresividad y desconcierto; están descalificando a los empresarios, al gobierno, a la política, a los medios de comunicación; entonces, creo que lo que hemos hablado acá es un comienzo para seguir conversando y dialogando, porque entre todos vamos a salir con un Chile mejor desde estos momentos de turbulencia”.
MEDIOS
A su vez, la periodista de La Red, Beatriz Sánchez, se enfocó en el rol que cumplen los medios de comunicación. “Tener la posibilidad de realizar una conversación como esta es vital, porque cuando hablas de medios de comunicación y las miradas que tienen sobre algo en particular, en este caso la pobreza y cómo se aborda, en el fondo haces una clase de radiografía”, indicó.
Comentó que los medios de comunicación son el reflejo de la sociedad, siendo estas instancias buenas, porque se ven más detalles de cómo miramos y retratamos la sociedad. “Los medios de comunicación tienen una pega muy delicada, cumplimos un rol social que es muy importante, es relevante que las personas sepan qué pasa, el contexto de las cosas, hacia dónde van o de dónde vienen, porque es la única manera de que puedan tomar una mejor decisión para su propia vida y estar involucrados en el país que viven”.
Como periodista expresó que “reflejamos un poco lo que pasa en la sociedad, pero tenemos que ir un poco más profundo que eso, para tratar de acompañar cambios; por eso son importantes estas instancias de reflexión, que nos muestran en qué estamos equivocados o haciendo mal”.
En cuanto al tratamiento de la noticia, la periodista indicó que cuando se trata de la pobreza, los medios tienen muchos desafíos, porque no escapan de las diferencias sociales, reflejando un Chile dual, donde hay gente que lo tiene todo y otros que no tienen nada; en vez de realizar denuncias o hacer lecturas más profundas para romper con el paradigma que existe.
“El debate sobre la desigualdad está presente en el país, y es una discusión que no se abandona, y los medios debemos entrar a ese debate, llevando un equilibrio de lo que pasa cotidianamente y no mirar las tragedias de un sector desde lejos y meternos a la tragedia misma en otro sector”, enfatizó.
En una mirada más local, la Jefa del Departamento de Prensa de ATV, Carolina Gallo, se refirió a la reflexión que hacen los medios antofagastinos: “Creo que hay más conciencia que nunca de poder utilizar un mejor lenguaje cada vez que vamos a tratar un tema que tenga que ver con migración, pobreza o delincuencia”.
Agregó que “es un proceso que está corriendo, estamos en cambio, por eso uno busca ser parte de esa inclusión, justicia social, de emparejar la cancha. El tema que se está discutiendo abre un camino para ponernos de acuerdo y ser un agente de cambio, contribuyendo a lo que está pasando con la sociedad”.
SEMINARIO
En un esfuerzo para generar un espacio que permita reflexionar y discutir acerca del rol de los medios de comunicación, sus profesionales y líderes de opinión en el análisis de aquellos aspectos que preocupan a la ciudadanía, se realizó el Tercer Seminario de Comunicación y Pobreza.
“Es un placer poder reunirnos por tercera vez en un evento de esta magnitud y calidez, que nos convoca a conversar sobre un tema de tanta relevancia”, expresó Francis Espinoza, Directora de la Escuela de Periodismo de la UCN.
Dicha Unidad Académica realizó el seminario por primera vez en 2008, el cual tuvo como objetivo reflexionar y debatir en torno al rol que desempeñan los medios de comunicación frente a la pobreza. El año pasado se basó en el rol de los medios y del periodista en los desarrollos noticiosos de los temas sociales y la formación universitaria del periodismo como expresión de responsabilidad ciudadana. “Este año hemos querido darle una perspectiva regional al encuentro, reflexionando sobre el quiebre en nuestras conversaciones públicas y el traslado de estas a las esferas privadas; el desplome de las confianzas como producto de una sensación inminente de corrupción y caos en la política y en la clase empresarial”, comentó Francis Espinoza.
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