Tras dos años de estudios, una nueva generación de laicos recibió sus diplomas en Antofagasta.
En total fueron 33 los participantes de los Diplomados de Estudios Teológicos y Escuela de la Fe, quienes recibieron en Antofagasta sus certificados en el programa de perfeccionamiento que ofrece el Departamento de Teología de nuestra Universidad.
La nueva generación de laicos, culminó después de dos años su periodo de estudios teológicos y filosóficos que procuran cubrir la totalidad de los contenidos fundamentales de la fe y la moral cristiana, esfuerzo que concluyó con una ceremonia con los participantes y sus familias.
Al encuentro asistió el Arzobispo de Antofagasta y Gran Canciller de la Universidad Católica del Norte, Monseñor Pablo Lizama, autoridades universitarias y académicos del programa.
En la oportunidad, el Vice Gran Canciller de la UCN y Director del Departamento de Teología, Padre André Hubert Robinet, agradeció a cada uno de los familiares y amigos que acompañaron a la nueva generación de laicos. “Quiero agradecer a todos los alumnos, ya que hoy recibieron un don cristiano para prepararse de mejor forma para evangelizar el mundo. Desde hace años hemos implementado estudios teológicos para formarse espiritual, teológica y profesionalmente, y el diplomado profundiza la fe y da herramientas para vivirla y anunciarla”.
PERFECCIONAMIENTO
En representación de los estudiantes del programa, Frank Honores entregó un mensaje a los nuevos diplomados, destacando que “es un privilegio poner fin a un ciclo académico y a una continuidad y perfeccionamiento espiritual; solo quiero agradecer estos dos años de estudios, donde se cumplió un objetivo bíblico, este diplomado ha sido esa semilla para surgir en estudios de la teología y servir al mundo en el cual nos encontramos insertos”.
Finalmente, el Padre André Hubert destacó que el Departamento de Teología en su labor de evangelizar el norte, realizará nuevos programas, como un Diplomado en Filosofía y Licenciatura en Ciencias Religiosas. “Estos programas se insertan en el Plan de Desarrollo Corporativo, que parte de los principios del Humanismo Cristiano y busca contribuir al desarrollo de la persona, la sociedad y de su herencia cultural”, enfatizó.
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