Experto mundial en el área, Dr. Emilio Custodio, abordó temática de importancia estratégica en la Casa Central.
La necesidad de “conocer, medir y observar”, para luego tomar decisiones cuyos beneficios sociales sean maximizados, resaltó el Dr. Emilio Custodio Gimena, experto mundial en aguas subterráneas quien visita la Región de Antofagasta para aportar sus conocimientos en un área que cobra cada día mayor relevancia en la zona.
Aspectos claves referidos a las características y manejo de este recurso hídrico, tomando como referencia la experiencia española y la realidad chilena, expuso en nuestra Universidad el científico hispano, quien indicó que frente al tema es fundamental no cerrarse en un concepto, o decir que todo es conservación o desarrollo puro.
“Hay que buscar un equilibrio y este es difícil. Va cambiando a lo largo del tiempo según las prioridades. Lo que hay que tener es una planificación flexible, que se vaya renovando con cierta periodicidad y que esté basada en una observación cuidadosa y bien analizada para ir dirigiendo los esfuerzos hacia donde tengan que ir”, puntualizó.
La intervención del experto incluyó temáticas referidas a sistemas acuíferos, recargas, reservas, explotación, aspectos económicos, gobernanza y uso del agua subterránea en la industria minera, entre otros tópicos de creciente interés en el norte de Chile.
Abordó aspectos contingentes como la legislación en torno al tema, la que -dijo- tiene implicaciones políticas y sociales importantes. “Una cosa es lo que se quiere hacer y otra lo que realidad permite”, resaltó.
Sobre las amenazas que sufre este recurso, el catedrático de la Universidad Politécnica de Cataluña (Barcelona) nombró la existencia de diversos factores. Entre éstos, señaló el efecto producido por el cambio climático global. No obstante, argumenta que el mayor impacto es generado por el accionar humano, el cual aclara es muy superior en cuanto a sus consecuencias.
EN LA REGIÓN
El científico realiza una estada en la Región de Antofagasta para aportar diversos conceptos relacionados con el manejo y protección del recurso hídrico. “Estudiamos la zona de la Depresión Central y partes del Bajo Río Loa”, indicó el científico, que realiza esta labor en el marco del Proyecto Anillo de Investigación Exploración y Evaluación de nuevos recursos de aguas subterráneas en la Depresión Central de la Región de Antofagasta”, que dirige el Dr. Christian Herrera, académico del Departamento de Ciencias Geológicas de la UCN.
Entre sus funciones está revisar la marcha del proyecto, aportar con ideas nuevas y entregar una visión global. Su misión es apoyar la labor del Dr. Herrera, con el cual mantiene una activa colaboración desde la época en que el experto español guió la tesis doctoral del académico de la UCN.
El Proyecto Anillo -en el que toman parte distintas instituciones de educación superior del país- está su fase inicial de recolección de datos y de reconocimiento del área de trabajo. Esta, comprende diversos sectores de la Depresión Central, que incluye la zona ocupada por las antiguas salitreras emplazadas en la región, más algunos sectores de la costa y de la alta cordillera.
La idea es analizar, en un contexto amplio regional, las posibilidades de las aguas subterráneas y de cuidado de los distintos medios ecológicos.
En el caso de la Depresión Central de la Región de Antofagasta -lugar donde se emplazaron numerosas oficinas salitreras, como Catalina, Chile y Alemania, entre otras-, el Dr. Herrera explica que no se perjudicaría la explotación de este recurso, ya que se trata de zonas esencialmente áridas, donde si se extrae agua no habría grandes cambios.
Lo contrario ocurriría en las zonas precordilleranas o donde hay manantiales o bofedales, lugares donde las actividades humanas podrían producir alteraciones. “No digo que no se exploten, pero si se va hacer, debe ocurrir con un cuidado razonable para proteger los sistemas ecológicos que en algunos casos son únicos”, sostuvo.
El académico de la UCN destacó el apoyo de las mineras El Peñón y Guanaco, las que han permitido que los científicos puedan acceder a los acuíferos y pozos de las captaciones que ambas compañías poseen.
En esos lugares se va a desarrollar un trabajo geofísico para reconocer la geometría de los acuíferos y, además, serán tomadas muestras para análisis químicos e isotópicos que entregan información sobre la edad, recorrido y calidad de las aguas. En total, será analizado un centenar de puntos de recolección durante el desarrollo de la investigación que comenzó en marzo de 2014 y que tiene una duración de tres años. La meta es que para principios de 2015 ya se tengan resultados que se traducirán en las primeras publicaciones. En ellas se dará a conocer esta información que es de gran relevancia para el beneficio de la comunidad en su conjunto.
Este proyecto pionero considera una inversión de 450 millones de pesos, y forma parte de un Proyecto Anillo del Programa de Investigación Asociativa (PIA) de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (CONICYT).
Cristian Herrera puso de relieve el aporte del Dr. Custodio en esta iniciativa. Durante una semana el académico europeo permaneció en la zona, donde realizó diversas actividades de carácter científico, además de dictar cursos y conferencias.
El proyecto cuenta, además, con el aporte de los investigadores de la UCN, Guillermo Chong, Hans Wilke, Rodrigo Riquelme, Pablo Salazar, Gabriel González y Rodrigo González, entre otros, además de estudiantes de postgrado de nuestra Casa de Estudios; y de connotados científicos extranjeros de las universidades de Cornell (Estados Unidos), Barcelona (España) y de Freiberg (Alemania).
CIENTÍFICO DESTACADO
Además de su trabajo en la Universidad Politécnica de Cataluña, Barcelona (España), el Dr. Custodio es reconocido en el mundo como uno de los principales referentes en lo relativo a aguas subterráneas.
Obtuvo su doctorado en la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales de Barcelona, y entre sus logros resalta el exitoso libro “Hidrología Subterránea”, texto basal en el estudio de esta materia en Hispanoamérica, editado en conjunto con Manuel Ramón Llamas.
Ha dirigido numerosos proyectos internacionales de investigación sobre aguas subterráneas en Europa, especialmente en las Islas Canarias, y es autor de numerosas publicaciones en las más prestigiosas revistas científicas. Es también Doctor Honoris Causa por la Universidad Nacional de Tucumán, además de ser profesor honorario de diversas casas de estudios de Iberoamérica.
En su país fue director general del Instituto Geológico y Minero de España, y es miembro de la Real Academia de Ciencias de esa nación ibérica.
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