Memorándum que da continuidad a la iniciativa fue firmado en la Universidad Católica del Norte.
Una comparación entre los desiertos más antiguos del planeta -el de Atacama en Sudamérica y el de Namibia en África- incluye la tercera fase del megaproyecto de investigación internacional “Collaborative Research Center 1211 (CRC1211): “Earth evolution at the dry limit” (“Evolución de la Tierra en el Límite Árido”), cuyo memorándum de entendimiento para dar continuidad a la iniciativa fue firmado esta semana en la Universidad Católica del Norte (UCN).
El estudio multidisciplinario, que es financiado íntegramente por el gobierno alemán, tiene como laboratorio natural el Norte de Chile, específicamente el área ubicada en la cordillera de la Costa entre el Sur de Arica y Paposo, en la región de Antofagasta. El trabajo incorpora diversas disciplinas asociadas a las Ciencias de la Tierra, tales como geología, climatología y biología, entre otras.
El Dr. Eduardo Campos, profesor titular del Departamento de Ciencias Geológicas de la UCN y coordinador chileno de la iniciativa, explicó que esta tercera etapa se extiende hasta 2028, constituyendo la fase final de una investigación que comenzó en 2016 y cuyas dos primeras etapas tuvieron una duración de cuatro años cada una.
Uno de los propósitos de la tercera fase del proyecto busca realizar una comparación entre el desierto de Atacama y el de Namibia, lo que podría contribuir a la definición de patrones globales que han determinado la evolución climática en el pasado.
“La comparación entre ambos desiertos, los más antiguos del planeta, se plantea como un resumen de los ocho años transcurridos desde los inicios del proyecto. A partir de los resultados obtenidos tanto en el desierto de Atacama como en el de Namibia, se busca establecer patrones climatológicos de carácter global”, destacó.
El investigador de la UCN explicó que el megaproyecto, que totaliza un financiamiento cercano a los 45 millones de euros, incluye la participación de un centenar de investigadores, investigadoras, estudiantes de doctorado y postdoctorados, quienes en forma colaborativa aportan a la generación de nuevos conocimientos en torno a ambientes con escasa disponibilidad de agua.
CONTINUIDAD E IMPACTO
La firma de la adenda al memorándum de cooperación firmado en 2017 que da continuidad al megaproyecto CRC1211, fue suscrito esta semana en Antofagasta por el Dr. Rodrigo Alda Varas, rector de la Universidad Católica del Norte (UCN); y por el Dr. Dietmar Quandt investigador de la Universidad de Bonn, quien cumple el rol de “co-speaker” en el proyecto.
La firma del documento tuvo lugar en el marco de un seminario internacional donde investigadores e investigadoras participantes dieron a conocer los principales resultados y alcances obtenidos en las dos primeras fases del proyecto.
Sobre el impacto de este trabajo colaborativo, que lidera la Universidad de Colonia (Alemania), y que cuenta con la participación de seis casas de estudios superiores germanas, más el aporte de cinco instituciones chilenas, el Dr. Dietmar Quandt dio a conocer las líneas centrales de la iniciativa. “Básicamente, lo que se busca es hacer ciencia básica en distintas áreas del conocimiento tales como biología, geología y climatología. La idea es aplicar ciencia básica con el objetivo de comprender de manera integral los procesos que han modelado el desierto de Atacama,”, remarcó.
El investigador europeo añadió que el estudio y la comparación entre el desierto de Namibia y el de Atacama son parte de una comprensión científica de procesos básicos, de cómo el paisaje y la vida evoluciona en un área con extrema limitación de agua.
Agregó que este tipo de conocimientos puede ayudar a entender diversos fenómenos que suceden en nuestro planeta y que se relacionan con el cambio climático. Por otro lado, permiten entender cómo evolucionan otros planetas que presentan condiciones de extrema escasez de agua, como por ejemplo Marte.
El Dr. Quandt añadió que durante los últimos ocho años el trabajo desarrollado se centró en un clúster de investigación en diversas áreas, como meteorología, geología y biología. “Lo que se busca en esta tercera fase es una integración de estos saberes y la construcción de un modelo integral que considere los distintos aspectos investigados en este proyecto. Y, además, preparar futuras propuesta de investigación”, especificó.
Destacó que la iniciativa ha sido extremadamente exitosa en términos de productividad científica, con más de 150 publicaciones de alto impacto con alto nivel de citas a nivel mundial (H=21). “La idea es proyectar la investigación realizada en el proyecto CRC más allá del 2028. Por ejemplo, en el caso de la investigación climatológica no basta con dos o tres años de registros, sino que realmente adquiere sentido cuando tiene 10 años o más de mediciones”.
La tercera etapa del proyecto está liderada por los académicos Dr. Tony Reimann (Universidad de Colonia), Dra. Christine Heim (Universidad de Colonia) y Dr. Dietmar Quandt (Universidad de Bonn), quienes de esta forma dan continuidad al trabajo iniciado en 2016 por el investigador de la Universidad de Colonia, Dr. Tibor Dunai. Por la parte chilena, el trabajo es coordinado en la UCN por el Dr. Eduardo Campos.
LEGADO
El proyecto ha contribuido en forma significativa en la generación de nuevo conocimiento científico. No obstante, su aporte también es relevante en la formación de capital humano, y en la incorporación de equipamiento e instrumental especializado que quedará instalado en forma permanente en el Norte de Chile.
Esta infraestructura incluye un total de 27 estaciones meteorológicas ubicadas en tres transectas del desierto de Atacama (Paposo, Cañón del Loa y Norte de Iquique), las cuales jugaron un papel fundamental en la primera y segunda etapa del proyecto, y que en la actualidad son patrimonio y están a disposición de la UCN, principal institución chilena colaboradora en el proyecto CRC1211.
“Es algo de lo cual tenemos que hacernos cargo como Universidad”, destacó el Dr. Eduardo Campos, quien agregó que a este equipamiento se suman camionetas todoterreno y drones, entre otro instrumental de utilidad para futuras investigaciones y para docencia de pregrado y postgrado en la UCN.
De igual forma, el proyecto contribuye con la formación de capital humano avanzado en la UCN, en especial en el programa de Doctorado en Ciencias mención Geología, y otorgará en esta tercera fase financiamiento a una estudiante UCN para que realice su doctorado en la Universidad de Colonia.
INSTITUCIONES PARTICIPANTES
La materialización del proyecto ha sido posible gracias al trabajo colaborativo de más de una decena de instituciones de Alemania y Chile. Por el país europeo participan la Universidad de Colonia, la Universidad de Bonn, la Universidad de Aachen, la Universidad de Heidelberg, la Universidad Goethe Frankfurt y el Helmholtz-Zentrum Potsdam. En tanto por Chile toman parte en la iniciativa la Universidad Católica del Norte (UCN), el Centro de Estudios Avanzados en Zonas Áridas (CEAZA), la Pontificia Universidad Católica de Chile (UC), el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin), la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC), la Universidad de Antofagasta (UA), la Universidad de Chile (UCh), la Universidad de Concepción (UdeC) y la Universidad Austral de Chile (UACh).
La puesta en marcha oficial y firma del memorándum de continuidad incluyó la realización de un seminario internacional que contó con la participación de investigadores que, desde sus distintas disciplinas, han contribuido al proyecto. En este grupo destacaron el Dr. Eduardo Campos, el Dr. Dietmar Quandt, de la Universidad de Bonn; la Dra. Cristina Dorador, de la Universidad de Antofagasta; la Dra. Alexandra Stoll, de CEAZA, la Dra. Julia Bechteler, de la Universidad de Munich; y el Dr. Olaf Bubenzer, de la Universidad de Heidelberg.
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