Director del Departamento de Ingeniería Metalúrgica y Minas (DIMM) de la UCN, Óscar Benavente, aborda los principales retos que enfrenta la principal actividad productiva nacional.
La incorporación de nuevas tecnologías, la formación de profesionales, el cuidado medioambiental y la creciente presencia de la mujer en la industria, abordó el director del Departamento de Ingeniería Metalúrgica y Minas (DIMM) de la Universidad Católica del Norte (UCN), Óscar Benavente Poblete, al referirse a los principales retos que enfrenta la principal actividad económica nacional.
“Uno de los mayores desafíos que tiene la industria, es que Chile acepte que es un país minero, y que las regiones donde se desarrolle sean orgullosas de su pasado y presente minero”, sostuvo el académico al reseñar sobre el rico legado histórico del sector y sus proyecciones.
En el marco de la celebración del “Mes de la Minería”, puso énfasis en los cambios que están en marcha y en la importancia que tiene la formación de capital humano altamente especializado, y la incorporación de nuevos conocimientos y tecnologías. “Las competencias de los nuevos profesionales mineros son técnicas y muy focalizadas en el sector minero metalúrgico. Actualmente, se les suman las exigencias de una industria cada vez más responsable con las personas y el medio ambiente, que necesita de equipos multidisciplinarios que utilizan las nuevas tecnologías de forma intensa, como la robótica y la automatización. Estas ya están implementadas en las faenas mineras, operando equipos autónomos, a distancia gracias al alto flujo de información que generan estos equipos y procesos, los que se deben abordar como una labor de trabajo en equipo, de muchas especialidades que confluyen en los procesos que se denomina Industria 4.0”.
Agregó que el DIMM de la UCN, con sus nuevas mallas, está promoviendo de manera especial el trabajo multi e interdisciplinario, con una infraestructura de talleres y laboratorios, tanto informáticos como de proceso, que permiten a los y las estudiantes adquirir estas competencias, siempre teniendo en cuenta la sustentabilidad de los procesos, es decir, minimizando el impacto en las comunidades y el medio ambiente, “ya que para tener una sociedad más sustentable, esta necesita de los metales para ser más verde”.
El Dr. Benavente indicó que un aspecto importante en los cambios que experimenta la industria, ha sido la creciente incorporación de la mujer en los procesos mineros. De ser casi nula hace un par de décadas, explica que en algunas faenas se está apuntando a una dotación de un 50% de presencia femenina en todas las especialidades.
En lo relativo a las proyecciones de la industria, el académico puso de relieve que Chile tiene un gran futuro minero, ya que sus reservas aún no terminan de cuantificarse. Asimismo, enfatizó que las personas son el motor de los procesos, que deben ser cada vez más integrados hacia adelante, es decir, “producir productos con un mayor valor agregado, no solo exportar concentrado y dejando pasar la oportunidad de desarrollar múltiples productos de mucho mayor valor, así como lo han hecho los países industrializados”.
No hay comentarios