Estudio caracteriza a los nuevos emprendedores inmigrantes en Antofagasta

Completa radiografía a quienes abren negocios en la capital regional, aportando a la economía y a la cultura.

Capacidad y predisposición al emprendimiento con un trabajo autogestionado, generan los inmigrantes en Antofagasta, impactando a la economía y al desarrollo regional con un aporte a la diversidad en rubros orientados al consumidor final.

Tanto en el centro de la ciudad, como en otros sectores, puede apreciarse el aumento de establecimientos que ofrecen una variada gastronomía internacional, con especialidades peruana, colombiana, china y, en menor cantidad, colectividades instaladas hace décadas en la comunidad, entre ellas la croata y la italiana, entre otras, con una propuesta mejorada y nuevas tendencias.

Ante el aumento de la migración en Antofagasta en los últimos años, tres académicos de nuestra Universidad realizaron un estudio para identificar a un nuevo tipo de emprendedor en la ciudad, el inmigrante, al que denominaron “Emprendedor Sur-Sur”, porque provienen fundamentalmente de países del Cono Sur o con los que Chile tiene frontera.

Luis Miguel Rodrigo y Gianni Romaní, ambos de la Facultad de Economía y Administración; y Emilio Ricci, de la Facultad de Humanidades; encontraron a partir de una muestra de 314 negocios liderados por extranjeros -de los 431 existentes en la ciudad- a un nuevo tipo de inmigrante, caracterizado por ser más joven que los emprendedores locales.

DIVERSIDAD
La Dra. Gianni Romaní explicó que estos tienen más redes, mayoritariamente son mujeres y con un menor nivel educativo, sus iniciativas están más orientadas al consumidor final (comercio), con bajas barreras de entrada y poca innovación.

Los participantes de estas actividades provienen principalmente de países con los que Chile tiene frontera o de otras naciones sudamericanas.

“La muestra encuestada ha generado 1.147 empleos directos, logrando facturar más de 667,7 millones de pesos al mes. También hay que mencionar que la llegada de estos inmigrantes emprendedores ha supuesto un aumento significativo en la diversidad de la oferta del mercado local, introduciendo nuevas costumbres, productos, servicios y sabores desconocidos, ya que un 32% de ellos declara que no existían en Antofagasta”, dijo la experta.

La iniciativa partió en 2014 con un proyecto adjudicado por el académico Luis Miguel Rodrigo, correspondiente a un concurso de la Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo Tecnológico (VRIDT) de la UCN.

“La motivación nuestra consideró además la manifestación en contra de los inmigrantes, y estudios del tema por parte de los investigadores, como también el emprendimiento”, comentó la Dra. Romaní, Directora del Centro de Emprendimiento y de la Pyme (CEMP) de nuestra Casa de Estudios.

El estudio señala que el mayor porcentaje corresponde a peruanos y colombianos, quienes demoran tres años y medio en abrir un negocio. Primero trabajan para ahorrar, reuniendo un capital propio, la mayoría son mujeres, las cuales aportan sus conocimientos, cultura y nuevos sabores en la comunidad en que están insertos fuera de su país.

INTEGRACIÓN
El investigador y psicólogo Emilio Ricci manifestó que a raíz de las condiciones de trabajo y familiares en que se encuentran, prefieren integrarse rápidamente al emprendimiento, generando un impacto en la economía local.

La migración desde el ámbito psicosocial es estudiada desde 2009 por profesionales de la UCN y ante el crecimiento de la población extranjera, junto a las reacciones de la comunidad los profesionales decidieron llevar adelante la investigación en lo económico y el inicio de negocios, encontrando una actitud positiva y de esfuerzo por parte de quienes llegan buscando nuevas oportunidades.

Es así que, principalmente, autogestionan sus proyectos con una importante capacidad hacia el emprendimiento, en especial en el rubro alimentación, con nuevas tendencias culinarias que, a la vez, aporta al conocimiento de la cultura y al turismo.

Se trata especialmente de locales de expendio de productos de sus países, restaurantes con comida típica, todos con patentes legales, lo que habla bien de ellos, señala el psicólogo. “Esperamos continuar trabajando en el tema, para conocer qué acontece a futuro con el comercio que han establecido. Hasta el momento, en función de lo gastronómico, ha crecido y se mantiene en la ciudad”, puntualizó.

Señaló que Antofagasta es una comuna que no solo tiene migración extranjera, sino también nacional, lo cual genera condiciones interesantes para un proceso de transformación. En este sentido, dijo que la Segunda Región debiera ser una de las primeras donde el modelo intercultural se pudiera notar fuertemente, en especial de aceptación, lo cual radica en las políticas públicas que se puedan proyectar.