Emprendedores de las regiones de Atacama, Coquimbo y Metropolitana fueron los beneficiaros de una simulación de Certificación de Empresas B llevada adelante por alumnos de quinto año de la Escuela de Ciencias Empresariales, ECIEM UCN
La iniciativa universitaria contribuye a vincular con desafíos reales de 13 micro y pequeñas empresas a jóvenes que pronto serán profesionales, a través de una asesoría referida a la Simulación de Certificación de Empresas B y Plan de Acción, que alumnos de las carreras de Ingeniería Comercial y de Ingeniería en Información y Control de Gestión de la Escuela de Ciencias Empresariales (ECIEM) de la UCN sede Coquimbo, realizaron durante todo el primer semestre, y que fue dirigida por la académica Karla Soria Barreto.
Durante la ceremonia online de cierre del programa, Pablo Pinto Cornejo, director de ECIEM UCN, destacó el trabajo de los 58 estudiantes, quienes se vincularon directamente con los empresarios, “a través de un concepto de Empresas B que ha ido posicionando a la escuela en esta economía y que permite entender la sustentabilidad y la responsabilidad social”, dijo.
Por su parte, Carolina Fuentes Vega, Secretaria Docente y Estudiantil UCN Coquimbo, valoró la importancia del trabajo colaborativo “donde todos aportamos, desde la docencia, los estudiantes, los empresarios, para hacer algo mejor; contribuir a la innovación, el desarrollo de las empresas y de nuestra región”. Además, destacó la generosidad de los empresarios “para entregar su experiencia y conocimiento a nuestros estudiantes. Todo esto aporta a lo que buscamos como institución, que es una formación integral”.
Cabe recordar que las Empresas B aplican un modelo de negocios que, además de generar ganancias para sus accionistas, permite contribuir a la solución de grandes problemáticas sociales y ambientales, cumpliendo voluntariamente con estándares rigurosos para su desempeño social, ambiental, de transparencia y de mejora continua, transformando así a la empresa en un agente de cambio.
Un sello especial
El trabajo que los jóvenes realizaron, si bien es un proceso inédito por el contexto de distanciamiento social, tiene además un importante sello diferenciador, y es la metodología del Aprendizaje+Servicio, conocida como A+S.
Según explicó la Dra. Paulina Gutiérrez Zepeda, Secretaria docente ECIEM, consiste en que “hemos trabajado con una metodología didáctica que se llama Aprendizaje + Servicio, o también A+S. Los estudiantes apoyan con sus conocimientos a emprendedores y empresas reales, y en este caso particular para los procesos de autoevaluación para una posible certificación de Empresas B”.
“Uno tiende a dudar de los jóvenes, pero acá encontré alumnos muy reflexivos”
Juan Ruilova, de Queso Las Majadas, destacó las “buenas sinergias con los alumnos. Uno tiene que estar dispuesto a escucharlos, ver cómo trabajan, la metodología. Uno tiende a dudar a veces de los jóvenes, pero acá encontré alumnos muy reflexivos, y debo felicitar al equipo de alumnos que estuvo como padrino mío en este proyecto”, recalcó.
Desde Atacama, Gloria Muñoz Araya de Empresa MAK, explica que “estamos creando un futuro con oportunidades para todos, a partir de los residuos textiles damos vida a accesorios de triple impacto.”
Claudia Bustos Cortés de Sieger Store, nos explica que “logré ver varias fortalezas y debilidades de la empresa, de esa forma poder potenciar lo que ya estamos haciendo. También conocer los puntos por dónde empezar a mejorar y perseguir este triple impacto económico, social y ambiental”.
Apoyo a comunas de zonas rezagadas
Siete de los 13 empresarios pertenecen al proyecto PAEIR, Proyecto de Apoyo al Entorno Innovador Regional “Festival de la Innovación “, que ejecuta la empresa GEDES con el apoyo de Corfo.
GEDES es de las pocas empresas de la región que tiene esta certificación, su gerente regional Marisol Gutiérrez Herrera, destacó que “los profesionales que van a salir de la UCN ya van a tener este concepto de Empresas B, de preocuparse no sólo de lo económico, también de lo social y de lo ambiental, además de cómo es el trato directo con empresarios regionales”.
Empresas B: un nuevo paradigma empresarial
Joaquín Loaiza Espinoza, estudiante de Ingeniería Comercial, resaltó que “este trabajo nos permitió reflexionar sobre la importancia que tiene ser parte de este nuevo paradigma empresarial, y sobre todo en estos días en que como sociedad estamos viviendo un proceso de importante transformación. El cambio climático, la desigualdad social y la brecha salarial, nos hacen darnos cuenta que nuestra generación es la encargada de contribuir de manera activa a su solución, y el movimiento B es un gran punto de partida para ello”, explica Loaiza.
Para Mirna Fábrega Rojas, estudiante de Ingeniería en Información y Control de Gestión, “Como estudiantes esperamos que la información y conocimientos adquiridos por los socios tenga un impacto positivo en el rendimiento de las empresas y que se hayan motivado a seguir con este proceso de Certificación B, ya que esto se traduce generalmente en un buen rendimiento económico”, finalizó.
Los empresarios y empresarias que recibieron esta asesoría son:
• Mak, Gloria Muñoz Araya, Copiapó
• DMC Confecciones, Jacob Zepeda Piñones, Coquimbo.
• Sieger Store, Claudia Bustos Cortés, Santiago
• Arropa Spa, Rafael Quezada Gaete, La Serena
• Bou Simón SPA, José Tomás Bou, Coquimbo
• Sociedad Montajes Eléctricos RCA, Cristian Ledezma Ramírez, Coquimbo
• Sociedad Agrícola Atunguayco Ltda, Héctor Sepúlveda Sandoval, Monte Patria
• Agroecología Comunidad Agrícola Canela Baja SPA, Daniel Contreras Araya, Canela.
• Agrícola y Forestal Las Pirámides, José Francisco Cerda Smith, Punitaqui
• Las Majadas SPA, Juan Ruilova Leal, Punitaqui.
• Agrogestión Sustentable, Carolina Barrera Barrera, Ovalle.
• Exportadora R&D Ltda, María Fernanda Judith Rojas Leal, Combarbalá.
• Modesto Joaquín Rivera Delgado, Joaquín Rivera Delgado, Combarbalá.
Texto: Yarella Carvajal
Foto: Cedida
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