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“Día de la Tierra”: los malos hábitos que impactan el planeta

Fecha: 21 abril, 2021

“Día de la Tierra”: los malos hábitos que impactan el planeta

Académico UCN explica la importancia de consumir menos carne, mitigar las emisiones de dióxido de carbono y buscar alternativas para obtener energía.

Este 22 de abril se celebra el “Día de la Tierra” (oficialmente “Día Internacional de la Tierra”), una fecha para crear conciencia sobre temas que nos involucran a todos, como la contaminación y la biodiversidad. En este sentido, el jefe de la carrera de Ingeniería Civil Ambiental de la Universidad Católica del Norte (UCN), Javier Quispe, llamó a prestar mayor atención a aspectos como nuestros residuos, la energía, el agua, la conservación de la naturaleza y la defensa de los animales.

“Básicamente, el ‘Día de la Tierra’ es una jornada especial, donde en un momento las instituciones participaron para concientizar a la gente sobre la importancia de las acciones que realizamos los seres humanos”, explicó el académico.

“Es un día -agregó- donde se le rinde un homenaje y un reconocimiento a nuestro planeta y hogar; donde de alguna forma quisieron buscar una fecha en particular para que la gente tomara conciencia acerca de la importancia de que ahora tenemos que conservar nuestro entorno”.

Es un llamado de atención a todos nosotros, remarcó, en cuanto a que cada acción que desarrollamos tiene consecuencias, las que están a la vista.

IMPACTO

En el norte de Chile hay impactos significativos por efecto del cambio climático, con zonas donde ya no llueve y donde la escasez de lluvias ha provocado que las napas subterráneas desde las que se extrae el agua para el consumo humano, están a profundidades cada vez más grandes. Así, la calidad de ese elemento empeora y el arsénico sobrepasa las normas en general, comentó.

Quispe señala que, de acuerdo con expertos que estudian la dinámica de cómo funciona la Tierra, existen horizontes máximos hacia el 2050 en que cualquier cambio que hagamos para mejorar las condiciones de nuestra forma de vivir es reversible, como por ejemplo al mitigar las emisiones de dióxido de carbono.

El hecho de que nosotros cambiemos nuestro estilo de vida, consumiendo menos carne, puede tener un impacto significativo en las emisiones de dióxido de carbono; así como el proceso de eliminación de bosques también disminuye la captura de este elemento. “Todo ello provoca una reacción, por lo que los expertos dicen que si no se soluciona esto, hay que buscar nuevas alternativas para obtener energía”, finalizó el académico de la UCN.

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