Escuela de Arquitectura organizó jornada que contó con la exposición de diseñadora industrial y perito de patentes de diseño del Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI).
Con el propósito de presentar estadísticas sobre patentes industriales de diseño y la incidencia de cuántas son del mundo privado, empresarial o universitario, la Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica del Norte (UCN) organizó una charla sobre marcas y propiedad intelectual.
Titulada “Propiedad Industrial: Protección de Dibujos y Diseños Industriales”, la actividad se realizó en el auditorio Ángela Schweitzer de esa unidad, y estuvo a cargo de la diseñadora industrial y perito de patentes de diseño del Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI), Sandra Cárdenas.
En la oportunidad, la experta sintetizó que “la presentación se enfocó en conocer de manera más específica el sistema de protección de diseños y de dibujos industriales. Sin embargo, igual hicimos una revisión del contexto, pero principalmente tenía que ver con los dibujos y diseños industriales desde el punto de vista de la propiedad industrial, cómo protegerlos, qué se protege con ello, ejemplos de dibujos y de diseños patentados, y también de cierta estadística respecto de la presencia de universidades en el sistema de patentes a través de solicitudes”.
ESTADÍSTICAS
En la presentación, Sandra Cárdenas explicó que dentro de la generación de patentes a nivel nacional (descartando a las empresas multinacionales que también producen patentes en el país), el 40% de estas corresponden a personas naturales, 37% a empresas y el 32% a instituciones de educación superior.
Sobre la participación de las universidades en el sistema de patentes, la diseñadora industrial agregó que “la verdad, es que me gustaría que existiesen más patentes por parte de las universidades. Entiendo que en otros países el porcentaje cambió bastante. Hay harto en lo que es el área científica, pero no así para lo que es la cosa más práctica de desarrollo de objetos, de maquinarias, o quizás hace falta mayor enlace entre empresa y universidad en el desarrollo de cosas, más allá del cómo se comercializa”.
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