En una solemne ceremonia, cerca de 70 jóvenes recibieron sus diplomas en la Casa Central.
En una solemne ceremonia recibieron sus títulos 69 jóvenes de las facultades de Ciencias Jurídicas y de Ciencias, además de las escuelas de Arquitectura y Educación, culminando su etapa de formación académica en la Universidad Católica del Norte (UCN).
La jornada, como vienen siendo todas las titulaciones en el plantel, se llevó a cabo manteniendo las distancias y con los elementos de protección necesarios para prevenir los contagios de COVID-19.
En su discurso a los nuevos egresados, el rector de la UCN, Dr. Rodrigo Alda Varas, expresó que “en los últimos años, sus demandas académicas y emocionales aumentaron, dado que debimos enfrentar esta situación de pandemia. Pero los invito a aplaudirse, puesto a que superaron esta etapa, y llegaron a este punto que realmente vale la pena. A pesar de las diferencias en las carreras de los que hoy se titulan, nos une un espíritu en común, el cual es buscar un desarrollo de forma íntegra”.
Los alumnos realizaron su juramento y toma de compromiso ético ante el secretario general de la UCN, Fernando Orellana Torres. Asimismo, recibieron la bendición de parte del padre Gilberto Garay Cortés.
MEJORES ALUMNOS
Para esta promoción, el mejor alumno de la Facultad de Ciencias resultó ser el joven Juan José Villagra, quien conminó a sus nuevos colegas y también a la audiencia a aprender a agradecer cada momento de bienestar.
“En esta experiencia con la UCN he aprendido de mis profesores y también de mis compañeros. Ellos me han enseñado bastante y agradezco eso. También quiero invitarlos a aprender a valorar los buenos momentos, y siempre ser agradecido, tomando las críticas constructivas con humildad”.
El mejor alumno de la Escuela de Derecho fue Pablo Shultz Guadaroli, quien visiblemente emocionado, y luego de una síntesis de la historia del derecho a través de los tiempos, dijo que “cuando ingresé me pregunté si realmente había valido la pena estudiar esta carrera y, al cabo de cinco años, confirmo que fue una idea acertada, no solo por los conocimientos, sino también por el apoyo de mis compañeros”.
En la Escuela de Arquitectura, el mejor alumno resultó ser Carlos Ríos Cortés, quien compartió que “hemos resistido tiempos difíciles, primero con el estallido social y después la pandemia. Pero estos factores nos llevan a valorar la capacidad que hemos tenido para salir adelante, para ser profesionales más resilientes ante la vida”.
Por último, Kevin Tapia Lara, mejor alumno de la Escuela de Educación, junto con citar el Himno al Árbol de la educadora universal, Gabriela Mistral, dijo que “el agradecimiento debe ser a nuestras familias, amigos y obviamente, nuestros maestros. Hoy finalizamos un largo proceso que lo ejecutamos con mucho esfuerzo. Somos una generación a prueba de todo”.
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