Jóvenes de la Carrera de Química y Farmacia aportarán conocimientos para resolver necesidades del Campamento Mujeres Unidas.
Mejorar la calidad de vida y contribuir a resolver problemas de salud que afectan a los habitantes del campamento Mujeres Unidas de Antofagasta, es la tarea que emprendió un grupo de estudiantes de la Carrera de de Química y Farmacia de nuestra Universidad.
La iniciativa de vocación social, que tendrá una duración de seis meses, considera aportar la experiencia y conocimiento de las jóvenes en el área del uso racional de medicamentos, y espera generar instancias propicias para el control de enfermedades.
La puesta en marcha de este trabajo es posible gracias a un convenio suscrito entre el Departamento de Ciencias Farmacéuticas de la UCN y la Fundación Techo, entidades que unieron sus potencialidades para dar respuesta a las necesidades sociales del sector.
“Los alumnos harán un diagnóstico preliminar para ver cuáles son los problemas que afectan a esa comunidad, ver las patologías prevalentes existentes en el lugar y encontrar la forma cómo los pueden ayudar a resolver y dar soluciones a las necesidades que tengan en la administración de medicamentos”, resaltó el Director del Departamento de Ciencias Farmacéuticas, Dr. Francisco de la Fuente.
MOTIVACIÓN
Las ganas de colaborar son el factor común que caracterizan al equipo de tres estudiantes que iniciará su trabajo con los pobladores en el lugar.
“Vamos a entregar todo lo que hemos aprendido en este tiempo en un tema específico que les pueda ayudar. Para nosotras significa una oportunidad de adquirir más conocimientos y poder terminar nuestras actividades de titulación”, explica la alumna de último año de la Carrera de Química Farmacia, Pamela Cabello Pozo, quien muestra su entusiasmo por participar en este proyecto.
Sus compañeras, Rocío Araya Tapia y Evelyn Santibáñez Peralta, también coincidieron en el aporte que significa esta labor y en el impacto social que tendrá para los habitantes del lugar. “Estoy bastante esperanzada en que esto va a resultar un éxito, y que podré terminar mi tesis y brindar la ayuda que ellos necesitan. Mi trabajo está orientado a que la gente conozca más sobre prevención de drogas y enfermedades que tienen mayor prevalencia, como la hipertensión”, acotó Rocío Araya.
El aporte de las alumnas también fue destacado por la Jefa de la Carrera de Química y Farmacia, Alejandrina Alucema Vargas, quien explicó que dentro del perfil de titulados está la responsabilidad social de los egresados. “Estamos en una instancia que nos permite demostrar la utilidad que tienen nuestros profesionales en todo lo que es la promoción de salud, prevención de enfermedades, automedicación y el uso racional de los medicamentos”.
PREVENCIÓN
El Director Regional de Techo Chile, Nicolás Salinas Sepúlveda, valoró como un gran paso la materialización de esta iniciativa que favorece la prevención en diversos problemas que pueden afectar a la comunidad, como el embarazo adolescente y la automedicación, entre otros. “Nosotros buscamos que a través de la educación las familias vayan potenciando su conocimiento y que ellos mismos puedan ser monitores de prevención del manejo del higiene y cuidado del entorno. Estas herramientas van a ayudar que ellos mismos puedan ir derribando las barreras de estigmatización”, sostuvo.
Agregó que la Fundación Techo interactúa semana a semana con voluntarios a través de un modelo de intervención que incluye una mesa de trabajo en la que se abordan diversas materias, en lo que está considerado el tema de la salud, entre otros.
“Gracias a este convenio se nos van a facilitar las cosas en cómo generar una cultura a través de la educación en estos temas. Y este programa piloto busca que el día de mañana, mediante un buen trabajo de intervención podamos adquirir un espacio más grande que incluya más campamentos que en la Región de Antofagasta son cerca de diecisiete”, manifestó.
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