“Las herramientas entregadas por esta capacitación nos permitirá trabajar íntegramente con las familias desde el punto de vista biosicosocial”, destaca Ximena Sapiain, nutricionista del Departamento de Salud de Ovalle.
Con la adquisición de nuevas herramientas focalizadas en mejorar la atención de los usuarios y de gestión de los centros de salud, quince profesionales de diferentes áreas de la atención primaria de la Región de Coquimbo finalizaron el Diplomado en Salud Familiar, impartido por la Universidad Católica del Norte.
El programa, a cargo del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UCN, busca contribuir en la formación y desarrollo de un profesional en el área de la salud pública y familiar, con el propósito de contar con recurso humano competente en la atención de salud integral de la población.
En esta cuarta versión participó mayoritariamente personal del Servicio de Salud Coquimbo, procedente de Canela, Illapel, Vicuña, Río Hurtado, Ovalle y La Serena, que concluyó con éxito sus estudios, iniciados en junio de 2011.
En la ceremonia de certificación se otorgó un reconocimiento por mejor rendimiento académico y mejor compañero de promoción a Daniela Goretta (en la foto junto a su hijo y a la Coordinadora del Diplomado, Dra. Alejandra Lagos), y Ximena Sapiain, respectivamente.
Fortalecer la prevención
Para Ximena Sapiain, nutricionista del Departamento de Salud de Ovalle y becada por la Municipalidad de esta comuna, participar en el diplomado contribuyó a incorporar nuevos aprendizajes, además de fortalecer la atención primaria del modelo de salud familiar ofrecida en el centro que labora.
“Las herramientas entregadas por esta capacitación nos permitirán trabajar íntegramente con las familias desde el punto de vista biosicosocial, al brindar a los usuarios no solo una atención asistencialista centrada en la enfermedad que padezcan, sino una enfocada en la prevención y promoción de la salud, que involucra a todos los integrantes de la familia”, manifestó la profesional.
También valoró los conocimientos recibidos en el área de gestión que, destacó, mejorarán el trabajo en equipo como la calidad de atención a nivel usuario y familiar, que podrá ser aplicada en cada uno de los centros de salud de la región.
“El personal de atención primaria es el que atiende en primera instancia las necesidades de salud y está en contacto directo con la comunidad, por ello es necesario responder las demandas de la población en forma eficiente y de contar con profesionales competentes en la atención de salud integral de las personas”, señaló Sapiain.
Diversas realidades
En su intervención, la Dra. Alejandra Lagos, coordinadora del Diplomado, resaltó que el grupo humano convocado (en el programa) “correspondía a profesionales de la Atención Primaria en Salud de diversas realidades de la cuarta región: urbana, rural, más vulnerable, con mayor y menor avance en la instalación del Modelo de Salud Familiar, por lo que debo destacar la generosidad y respeto que hubo al compartir las experiencias profesionales y de vida de cada uno, lo que nos permitió aprender de las fortalezas humanas, la importancia de ampliar la mirada, de contextualizar a las personas, de ajustar las prestaciones a la realidad local, de respetar la diversidad, de valorarnos y de trabajar en equipo”.
Durante 8 meses, precisó la académica, se trabajó de forma intensa para lograr los objetivos de aprendizaje planteados en el programa del Diplomado, lo cual se evidenció en la aplicación de conocimientos adquiridos en el ámbito clínico y de la gestión. “Sé que los nuevos conocimientos enriquecen su vida personal y profesional”.
Asimismo, la Dra. Lagos valoró el desarrollo del Diplomado en Salud Familiar, que ya finalizó su cuarta versión, señalando que el mismo “ayuda a hacer realidad uno de los desafíos de la visión de la Universidad Católica del Norte, consistente en formar personas íntegras, innovadoras y emprendedoras, comprometidas desde su vocación social”.
Modelo de salud familiar
El nuevo modelo de atención familiar impulsado por el Ministerio de Salud está centrado en el cuidado integral de las familias. Se preocupa por el bienestar de las personas, en lo posible, antes que aparezca alguna enfermedad, entregándoles herramientas para su autocuidado, como es el caso de la diabetes, hipertensión y obesidad, que afecta a un porcentaje importante de la población.
Asimismo, esta iniciativa promueve estilos de vida saludables, fomenta la acción multisectorial y fortalece la responsabilidad familiar y comunitaria para mejorar las condiciones de salud de los niños, jóvenes y adultos.
En esta línea se inserta el Diplomado en Salud Familiar de la UCN, entregando a sus alumnos herramientas como los estudios de familia, consistentes en trabajar con un grupo familiar desde un punto biosicosocial integral, siendo apoyada por una red de profesionales del área de la salud, la psicología y social”, explica Ximena Sapiain.
Esto permite a los especialistas no solo focalizarse en la enfermedad o problema específico que afecta a una familia, sino además abarcar diferentes instancias que favorezcan y ayuden a ésta a enfrentar y superar la dificultad que las aflige. También, de preparar al núcleo familiar a nuevos cambios que puedan presentarse durante la evolución del problema, a través de guías anticipatorias.
Éstas, señala la profesional, “nos permiten detectar y actuar ante algún evento esperable en el usuario y/o la familia. Por tanto, un Centro de Atención Familiar (CESFAM) enfatiza sus acciones en la anticipación, promoción y prevención de la enfermedad, fomentando el autocuidado del usuario y su familia”.
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