La actividad fue organizada por el Voluntariado Huellas del Centro de Salud Estudiantil y el colectivo La Rebelión del Cuerpo, y tuvo como objetivo principal trabajar el empoderamiento femenino.
En el Campus Guayacán de la UCN se realizó recientemente el primer encuentro Sororo de “La Rebelión del Cuerpo IV Región”.
La actividad fue organizada por el Voluntariado Huellas del Centro de Salud Estudiantil y el colectivo La Rebelión del Cuerpo, y tuvo como objetivo principal trabajar el empoderamiento femenino, educar acerca de los estereotipos de género y la violencia simbólica, y cómo normalizamos ciertas conductas emanadas de estos estereotipos.
A través de una dinámica de trabajo colaborativo entre las y los participantes del encuentro, y las coordinadoras del mismo, estas últimas instaban a los participantes a compartir experiencias personales, logrando un descubrimiento y reconocimiento del efecto que tiene el machismo y el esquema patriarcal en la vida cotidiana. Las relatoras del encuentro fueron las coordinadoras de la Rebelión del Cuerpo IV Región, Erika Pilar López Guerrero y Karen Blanco Santander.
La joven Catalina Quezada Aguayo, externa de la universidad que participó en la jornada, manifestó: “No suelo participar activamente en este tipo de encuentros y el sábado fue la primera vez que iba a uno, y la verdad fue algo muy diferente a lo que pensaba, para bien. El ambiente fue muy agradable, puras mujeres fuertes y buena onda, compartiendo experiencias un rato. Fue muy dinámico y entretenido, te hace quitar la vergüenza y abrirte a conocer a otras mujeres como una y sus experiencias, te das cuenta que todas sufrimos lo mismo y debemos superarlo juntas.
Aprendes en base a testimonios, experiencias y buena onda”. La estudiante de Derecho y voluntaria de Huellas Natalie Toro comentó: “Fue una hermosa experiencia, fue un agrado compartir con las chicas de la Rebelion del Cuerpo en un espacio de sororidad y apertura de mente, en donde pudimos vislumbrar muchas situaciones en nuestro cotidiano vivir que nos limitan a ser quienes somos o queremos ser, es maravilloso como el Voluntariado Huellas pudo unirse en esta ocasión con la Rebelión del Cuerpo y brindarnos esta posibilidad de hablar de muchos temas que en general suelen estar invisibilizados.
Muy agradecida”. Finalmente, la estudiante de Derecho Fiama Catalina Muñoz Araya, voluntaria de Huellas y de la Rebelión del Cuerpo, nos contó su experiencia: “La actividad resultó ser muy gratificante para mí, no tan sólo por la utilidad que le puedo dar al conocimiento adquirido en mi quehacer como futura abogada, sino que también en mi crecimiento personal. El poder compartir con otras mujeres nuestras experiencias, ya sea respecto al conflicto con nuestro aspecto, con nuestro cuerpo, con los estigmas que cargamos al ser mujeres en una sociedad, aún, machista y patriarcal, tanto en el pensamiento como en la institucionalidad chilena, me hizo entender en carne propia el significado de “sororidad”.
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