El Objetivo de Desarrollo Sostenible número 9 tiene como meta desarrollar infraestructuras fiables, sostenibles, resilientes y de calidad para apoyar el desarrollo económico y el bienestar humano, con acceso equitativo para todos.
La industrialización inclusiva y sostenible, junto con la innovación y la infraestructura, desempeñan un papel clave a la hora de introducir y promover nuevas tecnologías, facilitar el comercio internacional y permitir el uso eficiente de los recursos. En este contexto, el proyecto “Objetivos de Desarrollo Sostenible para la Región de Antofagasta” del Instituto de Políticas Públicas de la Universidad Católica del Norte (IPP UCN), a través de su ODS número 9, tiene como meta desarrollar infraestructuras fiables y el acceso equitativo para todos en el territorio nacional y local. La iniciativa es financiada por el Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC-R) del Gobierno Regional de Antofagasta.
La innovación y el progreso tecnológico son claves para descubrir soluciones duraderas para los desafíos económicos y medioambientales, como el aumento de la eficiencia energética y de recursos. De este modo, su Objetivo de Desarrollo Sostenible número 9: “Industria, Innovación e Infraestructura”, se relaciona con el desarrollo de infraestructuras fiables, sostenibles, resilientes y de calidad, incluidas infraestructuras regionales y transfronterizas. Sin embargo, todavía queda un largo camino que recorrer para que el mundo pueda aprovechar al máximo este potencial.
PLANO REGIONAL
“En Antofagasta se alberga una de las industrias más importantes del país, por lo tanto, no da lo mismo la industria local que en otras regiones, por la incidencia que tiene del PIB. Dado el contexto internacional, ha ocurrido una aceleración en innovación y la necesidad de contar con infraestructura en la región”, comenta la ingeniera en Acuicultura y principal chief executive officer en DomoLif, Pamela Chávez, quien además es parte activa del Panel de Expertos que dirige este proyecto ODS regional.
Indica además que en 2009 la industria minera hace un giro importante hacia la innovación abierta, “al darse cuenta de que necesitaba mayor capacidad de proveedores locales, generando una plataforma de innovación abierta en la cual se fueron sumando otras compañías y que años después da vida al Programa de Compra Local. Esto permitió que dichos proveedores pudieran contar con flujos de caja suficientes como para incursionar en la necesidad de generar sus propios productos, lo que sin duda vincularía la incorporación de innovación pero no sólo en las compañías, sino también en los proveedores mineros”.
La Dra. en microbiología molecular y biotecnología de la Universidad de Kyoto, Japón, menciona también que “al contar con capacidad se empiezan a generar las especializaciones y llega la necesidad de investigar, porque para generar innovación se requieren especialistas y capital humano. Esto ha llevado a que se vayan creando centros de investigación y pilotaje en la región, fondos de inversión como ‘Lithium Ventures’ de SQM, donde hay una apuesta de invertir en aquellas tecnologías que tienen un TRL muy temprano, por lo tanto, un alto nivel de riesgo, pero que son una mirada que nos puede llevar a un posicionamiento a nivel mundial”.
En esta línea, finaliza indicando que “yo diría que Antofagasta está en un escenario -en términos industriales, de minería, energía y litio- muy avanzado y que sólo se requiere consolidar infraestructura a nivel regional”.
METAS DEL ODS 9 al 2030
– Aumentar el acceso de las pequeñas industrias a los servicios financieros y su integración en las cadenas de valor y los mercados.
– Modernizar la infraestructura y reconvertir las industrias para que sean sostenibles, promoviendo la adopción de tecnologías y procesos industriales limpios y ambientalmente racionales.
– Aumentar la investigación científica y mejorar la capacidad tecnológica de los sectores industriales de todos los países.
– Facilitar el desarrollo de infraestructuras sostenibles y resilientes en los países en desarrollo mediante un mayor apoyo financiero, tecnológico y técnico.
– Incrementar significativamente el acceso a la tecnología de la información y las comunicaciones y esforzarse por proporcionar acceso universal y asequible a Internet en los países menos adelantados.
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