Proyecto beneficiará a pescadores de Tongoy.
La Universidad Católica del Norte iniciará a mediados de junio la entrega semillas de ostión fijadas en colectores a la Asociación Gremial de Pescadores de Tongoy, con el propósito de dar continuidad a la actividad ostionera luego de las pérdidas sufridas por las consecuencias del tsunami de Japón, compromiso que asumió la UCN dentro del plan de recuperación diseñado por el Gobierno Regional.
En esta primera entrega se espera transferir unos 50 millones de larvas fijadas, de las que pueden recuperarse entre uno y diez por ciento como semillas al cabo de dos meses de pre-cultivo en el mar, señaló Federico Winkler, académico de la UCN y director del proyecto que, con el financiamiento de CORFO, respalda estas acciones, agregando que,después de este traspaso “se prevén otros mes a mes, según un plan de trabajo de siembra de juveniles de ostión en el mar presupuestado hasta diciembre de este año en la bahía de Tongoy”.
El anuncio fue realizado durante un reciente taller de capacitación en esta materia efectuado en Tongoy, oportunidad en que el director regional de CORFO, Cristian Morales, destacó que con esta entrega inicial de semilla se cumplirá con lo prometido en abril por el Gobierno Regional a los pescadores. Lo importante, recalcó, es que confíen en el trabajo realizado en conjunto con la UCN, donde todo el esfuerzo es para que ellos tengan los mejores resultados en cuanto a la cosecha del ostión”.
Por su parte, Heraldo García, secretario de la Asociación Gremial de Pescadores de Tongoy, valoró el próximo aporte en semillas, manifestando que, de esta manera, la actual baja en la producción tanto natural como de ostiones colgados podría recuperarse en alrededor de un 30 por ciento del stock que debiera existir en la bahía para seguir continuando con la captación de larvas naturales.
El proyecto INNOVA 05CR11PPT-18 “Mejoramiento del rendimiento productivo del ostión del norte (Argopecten purpuratus) mediante la aplicación de técnicas genéticas”, es desarrollado por los investigadores Federico Winkler, especialista en genética, y Katherina Brokordt, experta en fisiología y reproducción, con la colaboración de Emilio Figueroa, biólogo marino a cargo de reproducción y cultivo, y la ingeniero comercial Gloria Hiche, responsable de la transferencia.
La iniciativa pretende mejorar el rendimiento productivo del ostión del norte en un 4% en ciclos de 24 meses, mediante la aplicación de técnicas genéticas. Así se establecerá un programa de selección basado en el mérito genético de los reproductores, que incluirá información sobre el potencial productivo (índices fisiológicos) de los individuos, el que generará larvas, semillas y reproductores mejorados genéticamente para la industria. Se generarán y empaquetarán herramientas de diagnóstico fisiológico que permitan certificar la calidad de semillas que se transen en el mercado.
La metodología se basa en la adaptación de técnicas aplicadas al mejoramiento genético en agricultura, cuyos resultados han sido largamente demostrados en ese ámbito, pero asume los caracteres singulares de la especie objetivo e incorpora la aplicación de indicadores fisiológicos para la toma de decisiones de selección para aumentar la eficiencia de un programa de este tipo. Sería así el único programa comercial de mejoramiento genético de pectínidos existente en el mundo.
No hay comentarios