Niños de distintos sectores pasaron una Navidad llena de sorpresas en la UCN, desde conocer al viejito pascuero, hasta hacer una visita a distintas instalaciones de la universidad.
Muchos celebramos una Navidad en familia, con una mesa llena de comida y donde se espera con ansias la medianoche para abrir obsequios en los que invertimos una gran cantidad de tiempo y dinero; en esta ajetreada dinámica que seguimos año a año, muchas veces nos olvidamos de los que no pueden tener una feliz Navidad; pero los que no se olvidan son los integrantes de la Pastoral UCN, que sólo para esta festividad prepararon 10 Navidades Solidarias, con el fin de llevar alegría y esperanza a niños, ancianos y reos, aunque sea sólo por una par de horas.
En este marco, la Pastoral UCN celebró en la universidad la quinta Navidad Solidaria este miércoles 14 de diciembre, en la que niños de entre 3 y 12 años pudieron compartir una agradable tarde en la que cantaron villancicos, recibieron regalos del viejito pascuero, compartieron una mesa totalmente dedicada a ellos y, finalmente, pudieron ir al acuario perteneciente a la Facultad de Ciencias del Mar.
Los niños provenientes de Punta Mira, Las Vertientes y Blanca Esperanza llegaron expectantes y con ojos curiosos, pero a medida que avanzaba la tarde las sonrisas y juegos fueron en aumento, porque la organización que conlleva hacer esta Navidad es por y para ellos en su totalidad. Para Alejandro Cuturrufo, director del Departamento de Pastoral y Cultura Cristiana, el objetivo es que “estos niños que están tan carentes de afecto muchas veces, con abandono familiar en otros casos, no se queden sin Navidad, no se queden sin el sentido del acontecimiento de este maravilloso mensaje que es Dios que se hace hombre”.
Es el sello solidario de la UCN el que permite que niños en riesgo social de la región sean partícipes de este tipo de actividades, que se transforman en encuentros en los que pueden salir de su sector y conocer realidades que están fuera del contexto en el que ellos se encuentran.
Es en esta idea de ayuda a los más desprotegidos, que la Pastoral UCN sale a las calles y se vincula con las necesidades de la gente que vive en sectores vulnerables, y son testigos día a día de cómo el ser atento y entregar cariño va dejando una marca en la vida de muchas personas.
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